El cerebro de Elon Musk y su equipo de trabajo no para de maquinar ideas que marcan un punto de inflexión dentro de las nuevas tecnologías de los vehículos. En esta ocasión, Tesla patentó una innovación que podría revolucionar el futuro de los limpiaparabrisas al reemplazarlos por rayos láser.
Fue presentada inicialmente a la United States Patent and Trademark Office (USPTO) el 10 de mayo de 2019, y fue aprobada el pasado 7 de septiembre de 2021.
La idea de Tesla consiste en prescindir de limpiaparabrisas de goma y sus brazos asociados, sustituyéndolos por rayos láser, emitidos desde un soporte en el capó.
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Estos irían dirigidos a la suciedad o elementos externos situados sobre el parabrisas, tales como gotas de agua. Los propios pulsos del láser se limitan en potencia para que no superen el grosor del parabrisas, y en tiempo real, variarían su potencia para despejar el elemento que dificulta la visión de los conductores
Configuración de la estructura
El sistema tendrá dos sensores ópticos en el centro del capó que apuntan hacia el parabrisas y detectarán automáticamente cualquier acumulación de residuos sobre el cristal.
Según se puede leer en la propia patente, estos desechos pueden incluir en otros: “La nieve, las gotas de agua, la pintura, los excrementos de pájaros, las manchas de bichos, la cáscara de las plantas, los derrames de aceite, la suciedad y el barro”.
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Una vez encontrados los desperdicios, el programa emitirá láser pulsado que, de acuerdo con Tesla, proporciona una solución rápida, eficaz y libre de productos químicos que puede servir para limpiar tanto los cristales de los vehículos como los paneles solares, aunque también puede funcionar en combinación con otros sistemas de limpiaparabrisas convencionales.
Solución a un problema
Una de las limitaciones que tienen muchos de los sistemas de asistencia avanzada a la conducción, como por ejemplo el asistente de luz de carretera en los coches con faros adaptativos, es que el sensor que capta la información no puede ir montado en el borde más alto del parabrisas, que es la posición ideal para obtener los datos al tener un mayor campo de visión. Esto se debe a que las estructuras actuales no llegan hasta el borde del cristal y esas cámaras y sensores necesitan que esté limpio por fuera y por dentro.
Con el programa de limpieza del parabrisas y sensores mediante rayos láser de Tesla se evita este inconveniente y los dispositivos se podrán montar en la posición más óptima.
De este modo se pretende mejorar el funcionamiento del asistente de mantenimiento en el carril, los faros adaptativos, la alerta de colisión con frenado de emergencia, los de detección de peatones, entre otros.
Esta nueva patente no sólo sería más efectiva a la hora de evacuar el agua del parabrisas del nuevo Tesla, sino que también sería más eficiente, ya que los tradicionales no gozan de un aprovechamiento energético, mientras que este permitiría ahorrar electricidad para aumentar la autonomía de los coches eléctricos de la firma de Elon Musk.
Redacción I Jhonattan González
