Cuando DS Automobiles se comprometió recientemente con el Campeonato de Fórmula E al menos hasta finales de 2026, la firma describió su relación con la serie de monoplazas eléctricos como «l’histoire d’amour»: la historia de amor. Sin duda, hasta ahora ha sido una historia feliz.
Solo un año después de su separación formal de la marca hermana Citroën, DS se unió a la Fórmula E para la temporada 2014/15, el segundo año del campeonato y el primero en el que se permitió a los fabricantes desarrollar sus propios sistemas de propulsión. DS se asoció con Virgin Racing y Sam Bird consiguió su primera victoria en la cuarta carrera del año.
Desde entonces, DS ha ganado al menos una carrera cada temporada, el único fabricante en hacerlo.
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En la temporada 2018-2019, DS pasó a suministrar el equipo de Techeetah, que había ganado el título de pilotos de la temporada anterior con Jean-Éric Vergne.
La nueva asociación que pasó a llamarse «DS Techeetah» dio sus frutos instantáneamente con un doble título de equipos y pilotos, ya que Vergne se convirtió en el primer conductor de la Fórmula E en ganar el campeonato más de una vez.
DS Techeetah reclamó otro doble título en la interrumpida temporada 2019-20, aunque esta vez fue el nuevo fichaje António Félix da Costa, quien se mudó de BMW y se llevó la corona de pilotos.
Expectativas en un nuevo arranque
DS comenzó la nueva temporada en Arabia Saudita como el equipo a vencer y con su historia de amor en la Fórmula E, alcanzando nuevos niveles. Eso ayuda a explicar por qué DS se ha casado con la serie durante al menos cinco años más, en un momento en que rivales como Audi y BMW están en el proceso de romper sus relaciones y buscar en otra parte el amor por los deportes de motor.
Pero, ¿qué ve DS en la Fórmula E que los gustos de Audi y BMW no ven? No hay duda de que ganar ayuda: es mucho más fácil para un fabricante justificar el gasto de marketing del automovilismo cuando está recolectando muchos trofeos.
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Si bien los fabricantes pueden usar la categoría para ayudar a desarrollar trenes de potencia eléctricos, que deberían ser mejorados por las próximas reglas Gen3, de mucha más importancia es la construcción de marca que ofrece.
Para una nueva marca como DS, todavía en proceso de establecerse como un verdadero rival francés de las firmas premium alemanas, la Fórmula E ofrece un importante impulso de perfil. Ayuda que DS haya sido más activo que muchos fabricantes a la hora de establecer un vínculo real entre sus coches de carretera y de carreras.
Fuente I Autocar
Redacción I Jhonattan González