Mitch Evans se estrenó esta temporada con otra imponente victoria en el E-Prix de Sao Paulo, Brasil.
El piloto de Jaguar pasó del puesto 22 a lo más alto del podio en la Ronda 1, una hazaña nunca antes vista en la Fórmula E, que lo vio encabezar la tabla y obtener un puntaje récord en el premio ABB Engineered to Outrun.
Una nueva era trae nuevas oportunidades, con tracción en las cuatro ruedas (una novedad para un monoplaza de la FIA) añadida al aumento de 50 kW del MODO ATAQUE, lo que supone una nueva variable importante a la que los pilotos e ingenieros tendrán que enfrentarse.
Contenido relacionado: Todo lo que dejó la primera jornada de la Fórmula E
Aun así, cuando Mitch Evans se alineó en el puesto 22, convertirse en el primer ganador del GEN3 Evo de la serie habría parecido algo muy lejano.
Adelantamientos magistrales
Apenas 45 minutos después, tras haber ganado 21 puestos y realizado 11 adelantamientos competitivos en el camino, el neozelandés estableció un nuevo récord como el primer piloto en ganar desde el último lugar.
Después de que un problema técnico en la clasificación lo obligara a detenerse en la pista y no lograra marcar un tiempo, el piloto de Jaguar comenzó la carrera desde el fondo de la parrilla.
Para pasar del último al primero, Evans tuvo que sortear un Safety Car y dos banderas rojas, esta última por un accidente en el que se vieron involucrados Nick Cassidy, compañero de equipo de Evans en Jaguar, y Pascal Wehrlein (TAG Heuer Porsche), actual campeón del mundo.
Fue un accidente muy peligroso para Wehrlein, que había conseguido la pole, ya que se dio la vuelta en el incidente apenas unas vueltas antes de la bandera a cuadros. Afortunadamente, ambos pilotos resultaron ilesos.
Evans solo lideró seis de las 35 vueltas, pero se colocó al frente cuando más importaba. Una primera vuelta rápida marcó el tono: después de ganar tres posiciones en las primeras curvas, Evans realizó una maniobra audaz a mitad de la vuelta al comprometerse con la línea exterior de los frenos en la curva 7, alejándose a milímetros del muro y siendo recompensado por esa decisión al terminar la vuelta en el puesto 15.