Un par máximo de 1.000 Nm y 500 caballos de potencia concentrados en tan solo 770 kilogramos, hacen del Baltasar Revolt una excelente propuesta para los amantes de la velocidad y los motores eléctricos.
Este increíble vehículo es el estreno de la marca española Baltasar en la industria automotriz. Capaz de acelerar de 0 a 100 km / h en tan solo 2,5 segundos, la nueva propuesta está diseñada para ser conducida en circuitos, aunque cumple los requerimientos solicitados por la FIA (Federación Internacional del Automóvil) para desplazarse en las carreteras.
Probablemente la principal limitante del superdeportivo eléctrico sea su precio inicial: 230.000 euros, una cifra bastante elevada pero que es compensada con cada uno de sus centímetros.
La simpleza del diseño y delicadeza en los acabados exteriores, hacen del Baltasar Revolt una joya rodante y minimalista enfocada netamente en el conductor, aunque permite la estancia de un acompañante.
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El diseño interior no tiene mucho que ofrecer, más que herramientas de velocidad a ser utilizadas cuando el lujoso coche esté puesto en marcha.
Cabe destacar que el desarrollo del Baltasar Revolt estuvo en secreto desde su inicio, ya que el propósito de la marca siempre fue construir una máquina eléctrica nunca antes vista y que impactara al mundo al ser estrenada, sin perder de vista que estaría lista para ser comercializada.
Detalles carga y composición
La fibra de carbono ha sido el material utilizado en el chasis y cuerpo del vehículo. La suspensión cuenta con una doble horquilla aeronáutica de aluminio con barras estabilizadoras ajustables.
Está compuesto con dos motores que ofrecen una potencia de 500 CV, mientras que su carga puede ofrecer un alcance de 100 km en tan solo 5 minutos.
Experiencia del piloto
La cabina es todo un paraíso para el conductor: Al tomar el volante (extraíble) el piloto contará con una serie de controles integrados y la oportunidad de utilizar cuatro modos de conducción: Eco, Practice, Race y Qualy.
Un par de asientos de carrera compuestos de fibra de carbono, casi idénticos a los que puede tener un monoplaza de la F1, complementan la experiencia que puede ofrecer uno de los vehículos más innovadores en el mundo de la movilidad eléctrica.
Redacción | Osward Rubio
