La pandemia del COVID-19 sigue amenazando a cuanta competición deportiva se atraviese en el camino. Es el caso del ePrix de la Fórmula E en Roma, que ha despertado inquietud debido a las estrictas medidas impuestas nuevamente en Italia por un nuevo brote
Con estas restricciones, la carrera podría desarrollarse en medio de un “toque de queda” para los locales. El fin de semana de la justa en Roma está programado del 9 al 10 de abril, pero los anuncios gubernamentales en el país podrían hacer que sea más difícil correr el fin de semana sin problemas.
Contenido relacionado: Escuderías muestran cada vez más compromiso con la Fórmula E
El 15 de marzo, se levantaron severas reglamentaciones en gran parte de Italia, incluida Roma y toda la región de Lazio, a causa de otra ola de coronavirus. Esto significa, entre otras cosas, un toque de queda de día completo para los habitantes del área.
Además, se han cerrado las fronteras de todas las regiones, lo que, aunque dificultaría la entrada del campo de la Fórmula E, uno de los portavoces de la serie prácticamente descarta que no puedan llegar a la capital.
Optimismo para la competencia
A pesar de todas las trabas en el camino, la dirección de la serie es optimista de cara a la carrera y no ve muchas posibilidades de que esto tenga un mayor impacto en el desarrollo del fin de semana.
Alberto Longo, uno de los fundadores de la Fórmula E, dijo que continuarán haciendo todo lo posible para garantizar un buen funcionamiento. Una de las medidas será que a cualquier persona que viaje al lugar se le realizará la prueba PCR antes de la salida y se repetirá más tarde. También durante el fin de semana de la carrera, en el lugar de prueba establecido por la serie.
Además, los empleados no podrán ponerse en contacto con los ciudadanos de Roma, solo se quedarán en sus habitaciones de hotel y en el campo. Asimismo, únicamente podrán acceder a esta última sede por primera vez un día antes del inicio del fin de semana.
Redacción I Jhonattan González