Arabia Saudita está preparada para albergar la primera carrera de Extreme E, el Desert X Prix, durante el 3 y 4 de abril en el impresionante destino de Al-Ula. Los organizadores revelaron las razones detrás de su elección de lanzar la primera temporada de la serie desde territorio árabe, destacando su objetivo de abordar problemas globales; uno de ellos, la desertificación.
Alejandro Agag, fundador y director ejecutivo de Extreme E dijo: “Esta serie de carreras ha sido muy esperada y se ha creado con el fin de mostrar la capacidad intransigente de la tecnología ecológica para impulsar automóviles en los terrenos más desafiantes del mundo”.
“Elegimos organizar nuestra primera carrera en Al-Ula, con el objetivo de arrojar luz sobre las amenazas que presenta la desertificación. Las magníficas dunas de arena y las impresionantes vistas del desierto representarán el escenario perfecto para mostrar las hazañas de las innovadoras obras maestras de ingeniería y las capacidades de conducción de clase mundial que participan en la competencia», explicó Agag.
La próxima carrera en Arabia Saudita será la primera salida de Extreme E después de años de planificación y contará con pilotos de renombre como Jenson Button y Carlos Sainz en su campo de competidores de clase mundial.
El objetivo principal de Extreme E es resaltar los desafíos del cambio climático que enfrentan diferentes ecosistemas en todo el mundo, al tiempo que muestra el rendimiento de los SUV totalmente eléctricos en condiciones extremas.
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El impacto del cambio climático, como el aumento de las temperaturas y los períodos de sequía más frecuentes y prolongados, junto con las acciones humanas como la deforestación, el pastoreo excesivo, el uso insostenible del agua y las prácticas agrícolas, han contribuído a la degradación del medio ambiente y la productividad.
Durante las próximas décadas, se prevé que la disponibilidad promedio de agua en algunas regiones disminuya entre un 10 y un 30%, lo que significa que 2.400 millones de personas en todo el mundo vivirán en áreas sujetas a períodos de intensa escasez de agua, desplazando hasta 700 millones de personas. Los desafíos agravados por el cambio climático en el desierto incluyen la escasez de agua y potencialmente cientos de millones de refugiados climáticos.
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Los desiertos son regiones en las que se evapora más agua del suelo que la que reemplaza la precipitación. Se caracterizan por condiciones extremadamente duras, escasez de agua y paisajes áridos. Lejos de ser terrenos baldíos, los desiertos son ecosistemas biológicamente ricos, con una gran variedad de plantas y animales adaptados a sus duras condiciones.
Como parte de los compromisos marcados por Saudi Vision 2030, el país buscará salvaguardar su medio ambiente aumentando la eficiencia de la gestión de residuos, estableciendo proyectos integrales de reciclaje, reduciendo todo tipo de contaminación y combatiendo la desertificación. El país planea promover el uso óptimo de los recursos hídricos mediante la reducción del consumo y la utilización de agua tratada y renovables.
Redacción I Jhonattan González